lunes, 19 de febrero de 2018

Sin rango.

Tu poca delicadeza me desesperanza,
tus ganas de que no seamos uno
Queriendo que sean uno, rompe todo el camino.

Tu violencia inaudita y sin sentido común , con sentido de poder
Hace que mi sangre hierba en su propia rabia, cómo metal fundido.
No hace falta que toques mis muñecas, solo con mi mirada puedo quemarte

Y quemarme con mi propia cabeza
Y quemarme por tu estúpida certeza
Y quemarme con el infierno de tus pecados, egoístas y absurdos pecados.


Tu mente clínica y siniestra hace que el temor a tu especie crezca intensamente , y la pena que siento no hay remedio que la cure, ni si quiera con el médicamente por excelencia que es el amor.


Tu falta de educación me duele en mis vértebras, y verte limpiar tu corona me repugna. justo en tu intelecto nace tu sabiduría de lo incierto , pero de lo que te conviene, y el papel se tiñe, de color verde y color rojo.


Ruedo hacia mi izquierda donde yace, la muerte diminuta, y el ensordecedor silencio de la inmundicia de tu creación que hace que retumbe el suelo, junto con el eco de lo que quedó por decir, de las fotos que quedaron por pegar
De las cartas que quedaron por mandar.



Sin piernas me mira , cómo si pudiera volar al decirme, que no necesita ni la más mínima parte de su cuerpo, si solo con sentir uno se siente vivo. Y es libre de volar.


¿Y si tú silla se quiebra? Y el alquitrán de oro los cubre envenenando todo tu ser , y con el humo matando tu propio hogar, vaporizado en tu codicia.


¿Pensas que somos iguales?
Y tú lucha separa aún más nuestras diferencias , con un capricho reprimido, construyendo una pared de hormigón que dice a gritos que nos odiamos , sin saber que el odio alimenta tu propio odio.



Aún así me encuentro enojado
Y la rabia me llena,
La tristeza me abre los ojos,
la pena que sufre tu mundo
Qué se viste de luto cuando solamente está mirando tus ojos.


La majestuosa existencia es el deleite de lo que no ves, de lo que ya no existe por qué no lo estás observando.


Tu inteligencia superior hace que odies sin sentido,
Tu inteligencia superior hace que nos mates.
Tu inteligencia superior hace que te destruyas por dentro.
Tu inteligencia superior , se vuelve ajena a la bondad
Pero solo por partes.

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